Franco Espinoza es correntino y tiene 20 años. En dialogo con NORTE repasó sus primeros pasos en la danza y contó cómo vivió la experiencia frente a cámaras en el escenario más prestigioso de la televisión.
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Un papá comparsero y una mamá bailarina es una combinación tan perfecta como necesaria que permite que Fran lleve la pasión y la danza en la sangre. En esta línea, Fran detalló:
«Mi mamá es profe de danza y directora de institutos de baile. Sabe de danzas españolas, árabe y otros ritmos».
«Creo que este fue el motivo o la persona que me inspiro a la hora de inscribirme a ese reality», adelantó sobre aquel día en quién pensó o en qué pensó al momento en que realizo el casting para Got Talent Argentina.
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Siguiendo con la pregunta anterior, Fran explicó que fue su mamá quién tuvo la idea y fue ella también quién lo motivó para que ambos se anotaran al reality.
«Cuando nos llamaron nos pusimos re felices. Dijimos bueno vamos, vemos que pasa», recordó el joven comparsero de Sapucay sobre ese día en que ambos se enteraron de que participarían del programa.
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Sobre esto, insistió en una pequeña aclaración. «Viajamos juntos a Buenos Aires y si bien no mostraron en ningún capítulo nuestro parentesco de madre-hijo, fuimos juntos al programa y fue hermoso ver bailar a mi mamá tras bambalinas. Yo la amo, es lo más», aclaró.
SUS PEQUEÑOS GRANDES PASOS
A lo largo de la entrevista Franco remarcó que su pasión por el arte, la danza y el baile viene de familia y que lo lleva inculcado en la sangre.
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«Desde muy chiquito comencé a salir en la comparsa», relató sobre sus comienzos en la danza.
Con una mamá bailarina y un padre comparsero es muy difícil pensar que un hijo no salga con esos genes. Sin embargo, Fran contó que su hermano, no es muy fanático del rubro, pero aseveró que su mamá resulta ser una persona muy inspiradora para cualquier cosa y a quién le sigue todos sus pasos.
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«Yo siempre le digo a mi mamá que las contracciones que yo le hacía sentir no eran contracciones, sino que eran mis primeras patadas de danza», contó al medio entre risas.
«Me inspiro mucho en ella para todo. Ella sabe todo de todos los estilos, enseña flamenco Wollywood, danza árabe y española. Sabe fusionar muy bien los estilos y es lo que más me gusta de ella, realmente es lo más», comentó orgulloso sobre su mamá.
Cabe destacar que la mamá de Franco Espinoza es una bailarina muy reconocida en la ciudad de Corrientes. Se trata de Karina Lencinas, quién ganó un premio con la comparsa Sapucay como mejor coreógrafa en 2020. Misma comparsa de la que Fran es figura.
En la actualidad dirige y enseña en varias de sus sedes en Resistencia y Corrientes. Al igual que Fran que hasta hace unos años formaba parte del grupo de maestros de una reconocida academia de baile de su ciudad. Ahora colabora y enseña en la academia de baile que su mamá dirige.
Sobre quienes son otras personas que lo inspiran cotidiamente para afianzarse aún más en su pasión, dijo:
«Mis amigos, me inspiran mucho. Amo compartir esos momentos con mis amigos bailarines porque soy muy sociable, me encanta compartir eso con ellos».
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«Sacan lo mejor de mí y yo les muestro lo mejor de ellos», agregó.
Siguiendo por esta línea más tímida de Fran explicó que es una persona muy pasional con las situaciones que vive o las que pueda pasar.
«Si tengo que llorar, lloro. A veces me cuesta mucho quebrarme, pero si lo tengo que hacer, lo hago», aseguró.
Por otro lado, se definió también como una persona muy exigente consigo misma. Alguien que cuando se le mete algo en la cabeza, no va a parar hasta conseguirlo y un poco con eso tuvo que ver su participación en el programa de Telefe, Got Talent Argentina.
Sobre lo que fue su gala, contó que cuando se vio por tele, quizás lo que vio la audiencia no fue su versión mas trasnparente. «Soné egocéntrico y yo no soy así», realizó un mea culpa sobre su participación en el ciclo de tv.
«Como ya respondí más arriba, también un poco tiene que ver con como uno siente las cosas en ese momento y dice lo que puede, pero no soy así. A veces pienso mucho las cosas antes de decirlas o hacerlas», agregó.
A veces entendemos que con confiar en uno mismo o sentirnos seguros con cada cosa que hagamos es suficiente para entender que por mucho bien que la hagamos, no pueda salir como la esperamos o conseguir lo que queríamos. En este sentido Franco contó que se quedó conforme con su paso en el reality que, si bien no pudo avanzar hacia las ediciones finales, por lo menos logró convencer al jurado aquella vez y se quedó con lo mejor.
Esto demuestra que fue tan solo una enseñanza más que el destino le permitió tener y que fue mucho mejor de lo que esperaba porque la pudo transitar con su mamá que al final de todo fue la que le inculcó junto a su padre la importancia de la perseverancia y el esfuerzo que le permite todavía seguir haciendo lo que ama.