El gasto en afiches proselitistas que realizan los candidatos para instalar su imagen se cae cuando el vandalismo o la «intervención artística» llega de parte de militantes de los circunstanciales adversarios.
Algunos eligen colocarlos en una altura considerable de modo tal de evitar este folclore innecesario mientras que la mayoría se ubica al alcance de todos para poder captar una atención mayor.
NORTE realizó una recorrida por algunas calles del microcentro y pudo observar dos situaciones que se dan seguido, que es pegar el afiche de un candidato para tapar al otro o bien directamente colocar el nombre del contrincante sobre el cartel que no es propio.
x
El primer caso lo padeció el postulante a la intendencia capitalina por parte del Frente Chaqueño, Diego Arévalo, que se tomó con humor lo acontecido y en sus redes sociales, publicó tanto el afiche intervenido como el que estaba «intacto», diciendo que no «se reconocía».
x
Mientras que por calle Pellegrini séxtuples de Élida Cuesta aparecieron con la leyenda Aguilar 2023. Sabido que el exministro de Economía es un férreo crítico de la gestión de la Comuna local desde el primer día y en este caso apuntaron contra la candidata del oficialismo.