Es oriunda de la Capital Federal, pero vive hace cuatro años en la ciudad termal. “No hay que bajar los brazos cuando uno quiere algo, hay que lechar por ese sueño”, expresó.
Soledad Brizuela es la primera mujer en Sáenz Pena que comenzó a manejar uno de los minibuses de la ciudad luego que la Municipalidad abriera el registro de conductores también para mujeres.
La nueva conductora tiene 38 años, es casada y tiene dos hijos de 13 y 18 años, es oriunda de Capital Federal y hace cuatro años que vive en Sáenz Peña. Soledad contó que hace unos años se capacitó en el manejo de transporte de carga: «Me capacité en muchas cosas, pero lo que mas me gusto fue el manejo y cuando hice la prueba dije «esto para mi» y ahora se dio la oportunidad de empezar con esto de los minibuses y acá estamos».
Al ser consultada de cómo le resulto la experiencia con los minibuses, expresó que para ella «normal», ya que conoce de «los vehículos, su técnica, y ahora estoy afianzarme con el vehículo, más que nada, que para mí no es algo nuevo».
Por el momento, Soledad realiza practicas arriba de los minibuses para conocer el recorrido, a la espera de la llegada de un nuevo coche. Reveló que, durante sus prácticas, algunos pasajeros se sorprenden, pero le brindan su apoyo, al igual que sus compañeros de trabajo. «Recibo mensajes de apoyo y todos muy contentos, al igual que yo con esta experiencia», agregó.
Sobre los recorridos, menciono que tiene un conocimiento general de los barrios de la ciudad, pero que va estudiando cada uno de ellos. «Siempre hay que capacitarse para cualquier trabajo, estudiar, leer y desde la semana pasada estoy recorriendo y salgo a recorrer lugares que tal vez no había ido antes. En mi tiempo libre también como quien pasea, recorro la ciudad y de esa forma voy memorizando las calles», dijo.
Por último, animó a otras mujeres a hacer lo mismo: «Si les gusta que se animen, sobre todo porque acá en Sáenz Peña no se ve a tantas mujeres choferes, no hay que bajar los brazos cuando uno quiere algo, hay que luchar por ese sueño, hay que seguir para adelante, en algún momento se dan las cosas».
«Hay muchos rubros que a veces la mujer o el mismo hombre no se anima a ocuparlos, hay que animarse a todo. Mientras a uno le guste, creo que ese es el límite que uno tiene, uno mismo», concluyo y agradeció a la Municipalidad por la oportunidad.
Fuente: diariochaco.com