Los jueces Eduardo Rodrígues Da Cruz, Elena Dilario y Román Lanzón, del TOF2 de Rosario, resolvieron este viernes luego de una audiencia que los 19 policías y el civil implicado en la causa por la desaparición forzada seguida de muerte del joven bonaerense Franco Casco, continúen el proceso en libertad.
La semana pasada, la sala I de el Cámara Federal de Casación Penal anuló la sentencia del TOF2, dictada en julio del año pasado, por la cual fueron absueltos los 20 procesados y acusados por la muerte de Casco. Además, el máximo tribunal penal del país ordenó que se dicte un nueva sentencia y estableció una serie de parámetros para la valoración de las pruebas producidas durante el juicio oral, que se extendió durante dos años en los Tribunales de bulevar Oroño.
Tras esa resolución, los fiscales Fernando Arrigo y Federico Reynares Solari pidieron al TOF2 la inmediata detención de los acusados y que regresen a prisión preventiva, bajo el argumento de que por las penas solicitadas -en varios casos de prisión perpetua- existe riesgo de fuga.
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En una audiencia realizada este viernes, los tres jueces del TOF2 desestimaron el planteo de los fiscales y establecieron que continúen el proceso en libertad. Algunos de ellos estuvieron casi seis años en prisión preventiva.
Fuentes judiciales consultadas por Conclusión dijeron a que a partir de ahora “la discusión que se va a venir” es cuál será el tribunal que deba dictar la nueva sentencia que ordenó Casación. “El tema que se va debatir es quién lo tiene que ejecutar”, añadió.
El caso
Franco Casco era un joven albañil de Florencio Varela que a fines de septiembre de 2014 vino a Rosario a visitar a familiares que residen en el barrio Empalme Graneros. El 6 de octubre se despidió de sus parientes y fue hasta la estación Rosario Norte para tomar el tren que lo llevara a Retiro. Eso alcanzó a avisarle a sus padres.
Sin embargo, nunca llegó a la estación ferroviaria del barrio porteño. Su cuerpo apareció flotando en el río Paraná el 30 de octubre del mismo año. La última vez que se lo vio con vida fue en la comisaría 7ª de Rosario, ubicada en el barrio Luis Agote. Varios detenidos en esa seccional declararon en el juicio que escucharon sus gritos y los ruidos de la paliza que le dio el personal policial, una práctica que -dijeron- era habitual en el inmueble de la fuerza de seguridad cuya premisa es prevenir y perseguir delitos, no cometerlos.
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Por ese hecho, investigado en la Justicia Federal como desaparición forzada seguida de muerte, fueron imputados con distintos roles y por diferentes delitos los policías Diego José Álvarez, Walter Eduardo Benítez, Fernando Sebastián Blanco, Cecilia Rut Elisabeth Contino, César Daniel Acosta, Enrique Nicolás Gianola Rocha, Cintia Débora Greiner, Marcelo Alberto Guerrero, Guillermo Hernán Gysel, Rocío Guadalupe Hernández, Esteban Daniel Silva, Romina Anahí Díaz, Franco Luciano Zorzoli, Ramón José Juárez, Belkis Elisabeth González, Rodolfo Jesús Murúa, Pablo Andrés Siscaro y Daniel Augusto Escobar.
En julio de 2023, tras dos años de juicio oral, el TOF2 dictó -en un fallo dividido- la absolución de los uniformados y de un civil acusado por encubrimiento. La semana pasada, la Cámara Federal de Casación Penal, anuló ese veredicto y ordenó el dictado de una nueva sentencia