En la última sesión del Concejo Municipal de Presidencia Roque Sáenz Peña se aprobó una ordenanza enviada por el Ejecutivo Municipal que modifica el régimen de habilitaciones comerciales e industriales, incorporando nuevas exigencias vinculadas al uso intensivo de agua y la emisión de efluentes en la vía pública.
La normativa establece que los comercios e industrias que hagan un uso elevado de agua o que generen afluentes deberán contar con una factibilidad otorgada por la empresa SAMEEP, encargada de regular el consumo y el tratamiento del agua.
Esta medida surge luego de intensos debates y acuerdos entre el Ejecutivo Municipal y SAMEEP, motivados por los problemas de aguas servidas que afectan distintos sectores de la ciudad, especialmente en la zona céntrica, donde incluso se tramita una acción de amparo presentada por vecinos.
Durante las audiencias judiciales vinculadas a ese amparo —en las que participaron vecinos, autoridades de SAMEEP, funcionarios municipales y concejales— se acordó avanzar en la elaboración de normativas conjuntas que permitan controlar y regular la actividad de los comercios e industrias que liberan agua hacia la vía pública, buscando dar soluciones definitivas.
El proyecto fue finalmente aprobado, aunque no contó con el acompañamiento del bloque del Frente Chaqueño, cuyos concejales solicitaron que la iniciativa vuelva a comisión para un análisis más profundo, argumentando que la ordenanza delegaría competencias propias del municipio a la empresa SAMEEP.
Cabe destacar que la ordenanza fue elaborada con la participación técnica de especialistas de SAMEEP y del área técnica municipal, garantizando criterios de control ambiental y sostenibilidad en las habilitaciones comerciales.

