Diego Buonanotte quedó grabado en la memoria del futbolero argentino. Por su gran aparición, sorprendente, en un River Plate mediocre al que ayudó a salir campeón en 2008. También, lamentablemente, es recordado por el trágico accidente que protagonizó.
Diego Mario Buonanotte nació en Teodelina, provincia de Santa Fe, el 19 de abril de 1988. Sus primeros pasos como futbolista fueron en una de las grandes escuelas del deporte nacional: Renato Cesarini de Rosario. De ahí, como pasa muchas veces, saltó directamente a un grande. River fue el primero que se fijó en él.
Debutó en el Millonario el 9 de abril de 2006, pocos días antes de cumplir 18. Recién en la temporada siguiente, con la llegada de Daniel Alberto Passarella como DT, comenzó a tener más rodaje en Primera. Su incursión cautivó a los medios: un chiquito atrevido, con mucha gambeta, una voz finita, apenas 1.61 metro de altura y una zurda artística. Todo un personaje.
Lejos de achicarse por su físico, Buonanotte se hizo líder futbolístico de ese River junto a un tal Ariel Arnaldo Ortega: con el Burrito fueron las piezas claves del título del Clausura 2008. Sus destacadas actuaciones le valieron una convocatoria a la Selección Sub 23 que conquistó la medalla dorada en los Juegos Olímpicos de Beijing, con Lionel Messi, Ángel Di María y Juan Román Riquelme como abanderados.
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Diego y el resto del plantel riverplatense cayeron en un tremendo declive durante el segundo semestre de aquel: bajo la conducción de Diego Simeone, el Millonario fue último en el torneo, que encima terminó con Boca campeón. Y así comenzó el tobogán del club de Núñez rumbo al descenso…
El trágico accidente de Buonanotte
Más allá de la pobreza futbolística de River en aquel entonces, Diego Buonanotte seguía siendo un nombre importante. Su vida tuvo un inesperado y dramático giro el 26 de diciembre de 2009: cerca de la localidad de Arribeños, en la provincia de Buenos Aires, el Peugeot 307 que manejaba el enganche de River sufrió un accidente fatal.
Buonanotte viajaba con otros tres amigos: los tres fallecieron por la colisión, después de que el futbolista perdiera el control del auto en una ruta resbaladiza por la lluvia. Él, único con cinturón de seguridad puesto, salió prácticamente ileso del choque… Apenas una fractura de clavícula fue el saldo físico de esa terrible mañana. Mentalmente los daños fueron mayores.
River lo acompañó en su recuperación, sobre todo psicológica. En la segunda mitad del 2010 volvió a jugar y en 2011 fue cedido al Málaga, de España. Lamentablemente, nunca pudo volver a mostrar aquel nivel del Clausura 2008.
La actualidad de Diego Buonanotte
Luego de su resonante surgimiento en River, aquel trágico accidente vial y su traspaso a Málaga, Diego Buonanotte anduvo por diferentes partes del mundo en busca de su destino: Granada de España, Pachuca de México, AEK de Grecia y Quilmes de Argentina. Su mejor desempeño, igualmente, volvió a encontrarlo acá nomás: en Chile.
En 2016 se sumó a la Universidad Católica, uno de las instituciones más tradicionales del fútbol trasandino. Ahí se reencontró con su mejor forma, logrando continuidad y jugando seis años en el equipo. El éxito deportivo volvió a sonreírle: sumó nueve trofeos domésticos con la U, siendo figura en varios de ellos.
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Ya asentado en Chile, ahora Diego juega en la Segunda categoría del país con Deportes Temuco. En el epílogo de su carrera, Buonanotte se reinventó y se sobrepuso a una tragedia enorme. Quizá no logró ser el crack que todos esperaban, pero sin lugar a dudas ha demostrado una fuerza de voluntad merecedora de reconocimiento.