El 13 de marzo pasado, el gobernador de Santa Fe Maximiliano Pullaro dio inicio a la construcción de un segundo carril en el puente carretero que cruza el río Salado para unir la capital santafesina con Santo Tomé, con una inversión que roza los 40 mil millones de pesos y un plazo de 24 meses para finalizar el proyecto.
Pero lejos de ser una celebración, el Puente Carretero se convirtió en un elemento más de conflicto entre Provincia y Nación por las obras públicas. Es que este martes, Vialidad Nacional sorprendió con la paralización de la obra alegando falta de habilitación de parte del gobierno central y exigiendo a la provincia el plan de contingencia hídrico y ambiental, entre otros requerimientos.
Pullaro no se quedó quieto. Por el contrario, ordenó a su ministro de Obras Públicas Lisandro Enrico desobedecer la nota de Vialidad Nacional y continuar con las obras de ampliación del puente que los vecinos reclaman hace décadas.
PUENTE CARRETERO SANTA FE – SANTO TOMÉAnte el Comunicado del Gobierno Nacional que pretendería paralizar la obra de la construcción del NUEVO PUENTE PROVINCIAL CARRETERO, queremos informarles desde el Gobierno de Santa Fe que la obra que se inició el 13 de marzo va a seguir tal… pic.twitter.com/jqnODqvGaM— Lisandro Enrico. (@lisandroenrico) April 2, 2025
De hecho a primera hora de este jueves, el gobernador encabezó la supervisión de los trabajos que se llevan adelante para el futuro enlace que conectará a las dos ciudades, y ratificó que “esta obra se va a terminar en los plazos que nosotros nos comprometimos con la sociedad”.
«Es una obra provincial que hacemos con recursos de todos los santafesinos y de todas las santafesinas, que está sobre una traza provincial que se emplaza sobre dos ciudades que pertenecen a la provincia de Santa Fe, sobre un río también que es de la Provincia de Santa Fe. Por eso no hay ninguna posibilidad que la obra la paremos bajo ningún tipo de intimación que nos puedan hacer», explicó eufórico.
El gobernador enfatizó en que “vamos a trabajar, a dialogar, a seguir trabajando junto a Vialidad Nacional. Nos llamó poderosamente la atención, pero bajo ningún concepto esta obra se va a parar, y se va a terminar en los plazos que nos comprometimos con la sociedad. Ningún burócrata nos va a decir qué podemos hacer y qué no podemos hacer sobre el territorio de la provincia de Santa Fe”.
“En la provincia de Santa Fe y sobre la provincia de Santa Fe nadie nos va a decir qué obra tenemos que hacer; nosotros vamos a hacer la obra que entendamos que tenemos que hacer con los recursos de la Provincia”, dijo, y ratificó: “Le vamos a entregar a Nación la documentación que ellos entiendan que le pueden solicitar a la provincia. No hay ningún inconveniente sobre eso. Pero la obra bajo ningún concepto la vamos a parar”.
Por su parte Enrico explicó que «vamos a construir una obra provincial a la par de un puente nacional, que el día de mañana va a servir para descongestionar la circulación de dos ciudades. Una estructura provincial de obra junto a una estructura nacional. Apelamos a que el día de mañana nos pongamos de acuerdo, y que un puente sea para un sentido y otro para otro».
El ministro dijo además que “tenemos seguridad del proyecto de avance, hay un convenio firmado entre Vialidad Nacional y Vialidad Provincial que regula el flujo de información, hay información que nos han requerido y que obviamente no está producida porque se va a hacer en el momento en que se tenga que hacer esa documentación técnica”.
¿Maniobra de campaña?
La orden de Vialidad se produce a diez días de las elecciones constituyentes en Santa Fe y en la administración provincial sospechan de una maniobra de campaña de parte de La Libertad Avanza orientada a complicar la lista de Pullaro.
Es que Marcelo Campoy, asumió al frente del organismo a mediados del año pasado tras la salida del cordobés Raúl Bertola con terminales en Schiaretti y Diego Santilli. Desde su nombramiento, no se privó de hacer política y se reunió con legisladores oficialistas para anunciar obras y proyectos. Uno de esos encuentros fue con la santafesina Romina Diez, protegida de Karina Milei, con quien anunciaron «un plan de acción para avanzar con dos anheladas obras viales», entre ellas, el Puente Santa Fe-Santo Tomé.
Ahora, aparece la paralización de la obra y sospechan que detrás se encuentra la mano de Romina Diez que digita la campaña provincial aunque ponen en duda la efectividad.
La obra
La indiferencia del Gobierno de la Nación y la falta de mantenimiento adecuado llevaron este puente al límite, hasta que fue necesario clausurarlo durante 9 interminables meses para realizar las reparaciones indispensables para su funcionamiento.
Así, el Gobierno de Santa Fe anunció la construcción de un puente paralelo -con fondos provinciales-, que contribuya a aliviar el tránsito de un Carretero que muestra evidentes signos de deterioro, generado luego de casi 9 décadas.
Y las primeras tareas comenzaron en el mes de marzo y las máquinas de la empresa adjudicataria de la obra ya realizan diversos trabajos en el lugar.
El enlace, que será paralelo al Puente Carretero: tendrá una longitud de 1.324 metros, y cuenta con un presupuesto de 39.811 millones de pesos (alrededor de 256 millones de dólares) y un plazo de ejecución de 24 meses.
El puente contará con una calzada de 8.30 metros de ancho para el tránsito vehicular, además de una bicisenda de 1.50 metros y una vereda de igual tamaño para peatones. Además, se construirán accesos en ambas cabeceras, así como diversas obras complementarias para mejorar la seguridad vial.