Tras una ausencia del plano político desde las presidenciales de 2023, Horacio Rodríguez Larreta confirmó este lunes que será candidato en las elecciones del 18 de mayo en la Ciudad de Buenos Aires.
A través de un mensaje en sus redes sociales, el exjefe de Gobierno porteño oficializó su postulación con duras críticas a la actual gestión: «Buenos Aires está mal y nadie te escucha. Está sucia, está triste. Ya no hay obras. Hay olor a pis», expresó.
«Vuelvo porque me duele. Porque conozco cada cuadra. Cada vereda, cada rincón. Vuelvo con vos. Vuelvo porque la quiero. Vuelvo por amor a Buenos Aires», agregó Larreta en su publicación, con un tono emotivo y un llamado a recuperar Capital Federal.
Larreta gobernó la Ciudad de Buenos Aires entre 2015 y 2023, sucediendo a Mauricio Macri, y en 2023 intentó sin éxito competir por la Presidencia de la Nación, ya que cayó en las elecciones internas del PRO contra la actual ministra de Seguridad, Patricia Bullrich.
A su vez, transmitió en varias oportunidades que el partido que integra desde su fundación perdió su identidad y desde comienzos del año compartió críticas de vecinos por el estado de la Ciudad de Buenos Aires. “La gestión actual no nos representa”, resumió.
Justamente es la imagen de gestor el principal activo que Larreta buscó transmitir en sus distintas recorridas por los barrios porteños y en los que resaltó distintos logros que alcanzó durante su administración y que hoy son cuestionados. Uno de ellos es la falta de limpieza, punto crítico que en el larretismo le adjudican a la caída de la imagen de la gestión porteña.
Te puede interesar:
Rodríguez Larreta lanzó MAD: qué es y cuáles son sus objetivos
Los gestos de Larreta iban camino a un alejamiento del PRO. El lanzamiento de Movimiento al Desarrollo (MAD) como también votaciones a favor de la ampliación de fondos para universidades y del aumento de jubilaciones por parte de larretistas en la Cámara de Diputados como en el Senado daban indicios de que se movía como opositor.
La decisión sacude el tablero electoral porteño ya que se espera una elección con múltiples candidatos y en la que el PRO posiblemente vaya en soledad, sin el tradicional frente que compartió justamente en las gestiones larretistas con la Unión Cívica Radical (UCR), la Coalición Cívica (CC) y otros espacios.