Un convoy de ayuda humanitaria cruzó este domingo hacia el sur de los territorios palestinos de la Franja de Gaza por el paso israelí de Kerem Shalom por primera vez desde que Israel aprobara la entrada por este punto, informaron fuentes humanitarias.
La escasa ayuda que entró al territorio desde el inicio de la escalada de violencia entre Israel y el movimiento islamista palestino Hamas lo había hecho por el paso de la sureña ciudad gazatí de Rafah, en la frontera con Egipto, con la necesaria aprobación de Israel.
La ONU y diversas organizaciones no gubernamentales y de derechos humanos se quejaban de que era «insuficiente» para atender las necesidades de los 2,3 millones de palestinos de Gaza que sufren la ofensiva militar israelí contra Hamas.
La semana pasada, Israel aprobó la entrada «temporal» de ayuda al estrecho territorio a través del paso de Kerem Shalom, que era hasta el inicio de las hostilidades entre Israel y Hamas uno de los principales puntos de ingreso y egreso de bienes.
Una fuente de la Media Luna Roja egipcia dijo que un primer grupo de 79 camiones pasó este domingo por Kerem Shalom, donde se descargan camiones que vienen del vecino Egipto y se transporta su carga a Gaza.
Asediada por el Ejército israelí y devastada tras dos meses de bombardeos, la Franja de Gaza enfrenta condiciones humanitarias críticas, con falta de agua potable, comida, e insumos médicos.
El 85% de la población civil de Gaza tuvo que abandonar su casa por los combates y bombardeos. De los 36 hospitales de Gaza, solo 14 se encuentran operativos, aunque con el mínimo equipamiento médico disponible.
El Cogat, el organismo del Ministerio de Defensa israelí responsable de los asuntos civiles palestinos, declaró que desde este domingo camiones de ayuda de la ONU se someterán a controles de seguridad y serán trasladados directamente a Gaza por Kerem Shalom.
Un 60% de la ayuda a Gaza pasaba por el paso de Kerem Shalom antes del inicio de las hostilidades entre Israel y Hamas, el 7 de octubre, luego de que milicianos del grupo islamista ingresaron a Israel y mataron a cerca de 1.140 personas, en su mayoría civiles.
Hamas se llevó consigo a Gaza a unos 240 rehenes, incluyendo una veintena de argentinos.
Israel prometió «aniquilar» a Hamas y bombardea sin cesar desde entonces el territorio palestino, donde han muerto unas 18.800 personas, el 70% de ellas mujeres y menores, según el Ministerio de Salud del enclave, gobernado por Hamas.